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Láser fraccionado CO2 para eliminar arrugas, acné o cicatrices

Es ideal para el resurfacing facial ablativo: mejora de cicatrices de acné, arrugas faciales y dilatación de poros de la piel. Así como la eliminación de lesiones pigmentarias (léntigos queratósicos) y otras imperfecciones. También es eficaz para eliminar cicatrices residuales derivadas de tratamientos quirúrgicos y para la corrección de estigmas producidos por el embarazo, la lactancia o la obesidad.

El dispositivo del Láser Fraccional de CO2 CANDELA emite un haz de luz infrarroja que penetra en la piel en forma de columnas térmicas hasta alcanzar la dermis profunda. Produce una ablación tisular con una lesión térmica mínima, gracias a que se combinan altas densidades de energía y pulsos muy cortos.

Una de las ventajas de este sistema es que los resultados son inmediatos. Aunque la reparación del colágeno alcanza su punto álgido a las tres semanas, la piel sigue mejorando durante los seis meses posteriores y los resultados son estables en el tiempo.

Dependiendo de las preferencias del paciente y de la patología a tratar, se puede realizar en varias sesiones, sin necesidad de pedir una baja laboral ni dejar de hacer la vida normal, o en una única sesión dejando de acudir unos días al trabajo.
Habitualmente suelen recomendarse de tres a cuatro sesiones para el tratamiento de las arrugas y cinco en casos de secuelas de acné. Pero en el caso de ser necesarias varias sesiones debe transcurrir un periodo de cuatro semanas entre ellas.

Este tipo de procedimiento se aplica con mayor frecuencia en el rostro, pero también puede aplicarse en el resto del cuerpo. También puede combinarse con la toxina botulínica, lifting con hilos tensores o los rellenos de arrugas para potenciar sus beneficios.

El tratamiento completo de la cara es rápido (aproximadamente 30 minutos), y es prácticamente indoloro, aunque se aplica previamente una crema anestésica en la zona a tratar para eliminar las molestias. Después del tratamiento se puede notar una sensación de quemazón, una leve inflamación y la zona ligeramente enrojecida y/o rosada. El pelado intenso durante los días posteriores (que desaparece por si solo a los pocos días) se debe a la regeneración automática de la piel.

Tanto antes del tratamiento como después se debe evitar la exposición solar, pues de lo contrario pueden producirse cambios en la coloración de la piel (hiperpigmentación postinflamatoria). Desde el siguiente día se puede maquillar o afeitar la zona tratada.
Durante el proceso es importante seguir las indicaciones dadas por el equipo de la Clínica de Medicina Estética Yolanda Albelda de Santiago de Compostela, realizar las curas durante la primera semana después del tratamiento e hidratar bien la piel.

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No hay que olvidar que, como en cualquier tratamiento de medicina estética, cuanto antes se actúe, mejores resultados se conseguirán, pues es más sencillo prevenir el envejecimiento que reparar algo que ya se ha dañado.
Lo ideal es actuar de forma temprana antes de que los signos de la edad sean muy patentes (en torno al final de la veintena) porque, igual que sucede con un coche, el mantenimiento es mejor que ir reparando cosas según se van estropeando.

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