En consonancia con el afán de superación continua y de actualización constante que guía la filosofía de la Clínica, nuestro equipo técnico ha tomado parte en este Intraoffice Course centrado en los “fillers” o rellenos que se infiltran en la piel, para corregir problemas estéticos, rellenar los volúmenes perdidos, estimular la producción de colágeno y elastina, hidratar y revitalizar la piel
El Ácido Hialurónico es un componente natural de nuestro organismo (presente en la piel, cordón umbilical, articulaciones…) que se emplea en medicina estética para rellenar arrugas profundas, surcos, ojeras, cicatrices, arrugas finas. También permite la remodelación de ciertas zonas del rostro como pómulos, labios, mentón, surcos nasogenianos o la mandíbula.
Pero además, el ácido hialurónico, tiene la propiedad de captar agua, restaurar la hidratación y elasticidad de la piel.
Tanto el bótox como los rellenos dérmicos obtienen excelentes resultados para atenuar las arrugas y las líneas finas de expresión del rostro, pero mientras la Toxina Botulínica sirve para suavizar arrugas, la infiltración de Ácido Hialurónico se suele utilizar para rellenar las arrugas y los pliegues del contorno del rostro, y devolver el volumen perdido a la cara por el paso del tiempo.