1º. EXPOSICIÓN SOLAR
De todos los factores que influyen en la síntesis de melanina y en la aparición de pigmentaciones cutáneas, las radiaciones solares son las que juegan un papel crucial, de manera que cuando nos exponernos a ellas el cuerpo lo detecta como una agresión y se defiende aumentando la producción de melanina. Inicialmente esto provoca el bronceado, pero si se hace de forma excesiva, es cuando pueden aparecer manchas.
- Las radiaciones UVA con longitud de onda mayor, son las responsables del broceado inmediato debido a la oxidación de la melanina previamente existente, aunque no provocan aumento en la síntesis de melanina. También son las responsables del envejecimiento prematuro de la piel y aparición de arrugas, ya que tienen mayor capacidad de penetración pudiendo actuar sobre las moléculas de colágeno y elastina.
- Los rayos UVB con longitud de onda más corta que las UVA, actúan sobre la epidermis provocando el bronceado "real", que dura varios días o incluso semanas. En este caso sí existe un verdadero incremento en la síntesis de melanina como respuesta al daño solar, pero también son las responsables de las quemaduras de sol o eritemas solares.
2º. HORMONAS
Existen factores intrínsecos hormonales que influyen en el exceso de pigmentación cutánea, como es la hormona estimulante de melanocitos (MSH), gran estimuladora de la síntesis de melanina y cuya producción se ve aumentada cuando se producen cambios hormonales importantes.
Los cambios hormonales son una de la causas principales de un tipo concreto de hiperpigmentación, mucho más frecuentes en mujeres que en hombres, conocido como melasma o cloasma (máscara del embarazo) y se cree que son debidas a cambios en las hormonas sexuales femeninas (el estrógeno y la progesterona) que estimulan la sobreproducción de melanina, problema que se agrava cuando la piel se expone al sol, por la ingesta de tratamientos hormonales como son los anticonceptivos o fármacos fotosensibles, e incluso en situaciones de estrés.
3º. EDAD
La aparición de hiperpigmentaciones cutáneas es muy frecuente y pueden aparecer a cualquier edad, sobre todo cuando son debidas a cambios hormonales, a la ingesta de tratamientos anticonceptivos y de otros medicamentos fotosensibles, etc.
Sin embargo, es cierto que a medida que vamos cumpliendo años existe un mayor riesgo a que aparezcan cambios importantes a nivel cutáneo, y que además de la aparición de arrugas, pérdida de la elasticidad y del volumen, hagan acto de presencia un determinado tipo de manchas muy relacionados con la fotoexposición solar y el cronoenvejecimiento.
Estos trastornos de pigmentación asociados al fotoenvejecimiento extrínseco, como son las pecas o efélides, léntigos actínicos o seniles, etc., van a aparecer principalmente en las zonas más expuestas al sol como la cara, escote, brazos o piernas.
A medida que la piel envejece y a partir de una edad madura, el número de melanocitos, células que producen melanina, va disminuyendo (se considera que un 10-20% por cada 10 años de vida), y las que quedan aumentan de tamaño, se concentran y pierden parte de su capacidad para la producción de melanina. Estos cambios fisiológicos explicarían el aumento de las manchas relacionadas con la edad en las personas mayores de 40 años, y su mayor sensibilidad a la exposición solar, con mayor riesgo de sufrir quemaduras.
4º. LESIONES CUTÁNEAS PREVIAS
La hiperpigmentación post-inflamatoria es aquella mancha oscura que aparece después de haber sufrido cualquier tipo de inflamación cutánea: cortes, quemaduras, acné inflamatorio, alergias, etc.
Como con cualquier tipo de mancha, existe una predisposición genética a padecerlas y están muy relacionadas con el Fototipo, siendo mucho más frecuentes en pieles oscuras.